PEDIR UN DESEO/ NACHA NEWBALL
Pedir un deseo, es querer arrancar al destino algo que se quiere que suceda, es anhelar y hacer posible un imposible, es querer tener algo por capricho, por pretensión o antojo. En algunos lugares existen pozos, en ellos, se tira una moneda y con la sensación más emocionante en el corazón, se pide lo que se quiere en el momento o para el momento. En otros lugares, se estila que al apagar las velas de una torta de cumpleaños, se pida algo deseado, se pretende que el solo querer traiga consigo lo que se solicita para ser feliz. Un deseo es algo esquivo, algo que es extraordinario y se quiere tener a mano. ¿Cuántos deseos se poseen en el corazón? Los humanos, se comportan como niños ante un anhelo, si de verdad existieran las hadas madrinas, tuvieran un buen oficio de mover la vara mágica y conceder cumplir con la ilusión de quienes las contrataran, al igual que si se pudiera contar con una lámpara maravillosa, que se frote sin tapujos para lograr muchos lujos, tangible...