LUGAR SOCIAL / NACHA NEWBALL
¿Hay razón para no tener un lugar?
Me hago esta pregunta una y
otra vez, con el fin de convencerme las mismas veces que, no es el deber de los
seres humanos de establecer ciertas diferencias y/o distancias, no podemos pretender
que al ser o pertenecer a una etnia o a un “estrato” seamos más o menos merecedores
de llegar a posiciones o tener logros.
Realmente el lugar social que
nos corresponde va en la proporción a lo que somos, lo que luchamos en el día a
día, lo que avanzamos en nuestro desarrollo personal y en lo que logramos transformarnos
internamente, no valen aquí los títulos nobiliarios, si los hubiera, ni la jerarquía
tácita que se genera al presuponer que somos “mejores” que otros.
No tienen ningún valor mirar
por encima de los hombros, nuestra estatura, suele ser más baja de la que
suponemos, cuando hacemos gestos o demeritamos a quienes nos rodean, todos
tenemos ilusiones de lograr llegar a una meta cuando suena el disparo en señal
de “listos para la partida”. La competencia no existe, cuando cada uno propicia
tener una característica similar y pone sobre su identidad una marca personal
que, lo hace sobresalir, sin ser más o menos.
El lugar social que
corresponde, es pues, el de la humildad con que se recoge la cosecha de lo
sembrado, es aquel en que el triunfo o el éxito no genera soberbia, sino aquel
que en su punto hace que alrededor se respire gratitud y admiración, sin pisar a
otro.
El lugar social que corresponde se logra con disciplina, persistencia y resiliencia.
Comentarios
De acuerdo, apreciada Nacha, sin que el éxito se vuelva inmanejable. Éxitos con tu nueva novela:*SENTENCIA ANTICIPADA*