LAS COSAS BUENAS TOMAN TIEMPO/ NACHA NEWBALL
Cuando los sueños se tienen en
el mejor lugar, queremos que ellos se desarrollen en el menor tiempo, nos
desesperamos en la espera y la angustia nos abriga cuando éstos no se van
cumpliendo en los plazos que hemos previsto para verlos florecer.
Las cosas buenas toman tiempo,
hay tiempo para tener sueños, moldearlos, ejecutarlos y en algunas veces toca
replantearlos, cuando todo no sale de manera correcta o según la expectativa que
hemos creado.
Un embarazo, es un ejemplo del
tiempo de los sueños que tienen una lógica línea de tiempo, sabemos casi de
inmediato que su duración es aproximadamente unos 9 meses, sin embargo, la vida
nos sorprende cuando se interrumpe por alguna razón o se reduce el tiempo
cuando viene anticipado, no tenemos el control de cuando sucede lo bueno o lo
malo.
Esta reflexión me hace pensar
en la siembra y la cosecha, a veces, sembramos en lugares desérticos, pensando
que no vamos a lograrlo, otras veces lo hacemos en tierra fértil y sabes, la
vida nos pone en un punto en que las cosas buenas no dependen solamente en el
tipo de tierra o de abono que usemos, más bien, la cosecha esta ligada al amor,
constancia, persistencia, paciencia y tolerancia con que hagamos el
acompañamiento a lo que queremos recoger en cosecha.
¿Cuántas veces hemos recogido
cosechas que, han sido esquivas, pero llegan?
¿Cuántas veces hemos dado todo
y en apariencia no pasan cosas buenas?
Las cosas buenas pasan, solo que,
en nuestra sobredimensión de las cosas, podemos esperar mas de lo que queremos
y al ser la expectativa mayor al logro las minimizamos. Es importante que cada
logro o cada paso se valore al máximo para disfrutar por pequeños que sean esas
alegrías que adornan el alma.
Las cosas buenas y malas, pasan para bien y tiene su tiempo cuando cumplen lo que visionamos.
Comentarios